Por un motivo u otro,
por ti,
siempre he dejado de ser feliz...
Entre el trayecto de mi,
mi necesidad, la soledad,
y tú...
No encuentro algo mejor,
que dejar el tiempo pasar,
aunque al fin el tiempo pase sobre mi,
pues las heridas no cierran,
y los recuerdos que me aquejan,
siguen estando allí...
Veo que el tiempo es una invención,
y lo dejo pasar,
como todo en lo que suelo creer,
se que me va a matar...
Porque lo que me hace estar solo,
es lo mismo que me hace ser único y especial...
¿Y de que sirve mantener esta convicción?
si nadie la va a querer,
como debe ser...
(Ni hablamos de amar)
(Ni hablemos de amar)
Por un motivo u otro,
por ti,
siempre he dejado de ser feliz...
Aún cuando,
decías vivir por mi...
Y no te podré dejar,
porque nunca he amado así,
y quemarme,
para llegar a ser,
testimonio de lo que fui...
(Lo que ardí)
(Lo que ardí)
Y no creo que nada pueda apagar este fuego,
impulsivo de mandar al cementerio,
a ese Umiel,
que se tortura con todo aquello,
en lo que no sirve creer.
Solo puedo sentir calor,
al pensar prenderme fuego,
y convertirme en cenizas,
luego del incendio,
ver el corazón ardiendo,
porque después de todo fuego,
queda polvo muerto,
y hasta la propia tierra quemada,
ya no es fácil de volver usar...
Y el humo de todo lo que fumo,
señal de estar ardiendo,
igual dejo pasar el tiempo,
y sino que pase sobre mi...
Y el aliento que gastas en cada mentira,
es el viento que aviva,
el fuego que me ha de consumir...
Y como luego de todo fuego,
mi corazón como la tierra,
quedará quemado,
y muy difícil de arar...
(No hablemos de cultivar)
(No hables de cosechar,
para ello es necesario tiempo,
y el tiempo no es real,
y no pasa o pasa sobre mi,
y así me matará...)
¡Y basta ya!
¡Se acabó!
no me dejaré torturar más con
las putas agujas del reloj,
aunque la única salida a la tortura
sea dejarse morir o matar...
Y ya no sé si me quiero emborrachar,
para olvidar,
ni fumar para desconectar,
si has nadado en un pantano entre sapos y barro,
y necesitas que te vaya a rescatar,
tienes que saber que no es mi elección,
tenerme que manchar.
Y escucho a asesinos de sueños,
pedir a sus amantes hundidos en fantasías,
ser amados con ilusiones intactas y limpias.
Pero no nos queremos emborrachar,
para olvidar,
ni fumar para desconectar,
si han nadado en pantanos entre sapos y barro,
y necesitan que les vayamos a rescatar,
tienen que saber también,
que nos hemos de manchar,
y si no les gusta la idea, esta es la verdad,
la consecuencia de actuar sin corazón y sin pensar...
Y no es venganza por que no acudimos allí,
más que por los gritos desesperados que nos hicieron oír,
sepan que nada es puro ni gratis,
así es vivir,
Y eso lo aprendieron,
como yo,
gracias a otras/otros,
como vos...
¿Ahora entiendes mi deseo de arder
para extinguir todo aquello de mí,
que hizo querer hacer un ser de una cosa...
Y acaricio la superficie áspera de esta perverción,
con una triste humildad
angustiosa,
consecuencias de las acciones falsas y asquerosas...
Y escucho a asesinos de sueños,
pedir a sus amantes hundidos en fantasías,
ser amados con ilusiones intactas y limpias.
Pero no nos queremos emborrachar,
para olvidar,
ni fumar para desconectar,
si han nadado en pantanos entre sapos y barro,
y necesitan que les vayamos a rescatar,
tienen que saber también,
que nos hemos de manchar,
y si no les gusta la idea, esta es la verdad,
la consecuencia de actuar sin corazón y sin pensar...
Y no es venganza por que no acudimos allí,
más que por los gritos desesperados que nos hicieron oír,
sepan que nada es puro ni gratis.
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