El ser, el siendo y el seré...

01:56 AM. Cierra los ojos, Déjate seducir por el sueño, Contempla tu inconsciente, Mientras tus oídos... ...Se apoderan del silencio...

lunes, 24 de junio de 2013

Botella de vino, que devino simplemente en una botella. / Umiel - Junio 2013



La sangre de una oreja perforada,
El leve dolor de una pasión estilística,
La mordida sutil en un rapto de pasión,
La saliva brilla sobre los cuerpos,
Perfumados por el sexo y el sudor.
Las agujas llenas de tinta,
Las marcas permanentes en cada mortalidad,
Una historia que deja cicatrices,
Que se mueven y no paran de hablar.


La entrega placentera a una causa altruista,
Que celebra la más bella inclinación de humanidad,
Entre las miserias atomizadas,
De esa bomba individualista.
Que explota en cada rapto egoísta entre luces de neón,
Entre policías xenofóbicos,
Entre el resentimiento social a los ojos de un dios pecador,
De negligencia humana y divina,
De desinterés que se defiende en marionetas simbólicas,
Encubriendo el estiércol con protocolos de algodón.
La palabra se tira a la basura,
Y la impunidad se sirve de vidas y muertes en derredor.
Brindan los cerdos organizados,
Entre buitres, zorros, putas elitizadas y religión.
Se decide el destino del mundo en un tablero de ajedrez,
Construido con capitales estadounidenses,
Procesado en partes en Corea del Sur y
Ensamblado con trabajo semi esclavo de niños en Hong Kong.

Bienvenidos a la ciudad del orto,
Donde la política se elije como un producto de Avon.
Donde los tiranos se babean al ritmo,
Del asentimiento de principitos,
Que se masturban frente a la cámara de control.
Se penetran las entrañas con los barrotes fálicos,
Del enrejado de las plazas donde se besaban enamorados como tú y yo.
Podrán privatizarme hasta el inodoro,
Pero no podrán callar a este corazón,
Que vuela con ideas libertarias,
En el desierto, en la llanura o dentro de una prisión.
O en eco de esas tumbas de humanos que no mueren,
Sino que siembran un camino,
Pintando cuadros con acuarelas de amor.
Con un pincel que se sostiene con millones de manos,
Con miles de caras, con cientos de cuerpos.,
con pasado y futuro, con millares de sueños y un lápiz de ilusión.

Escatofagia y comida. / Umiel - Junio 2013





Brota un rayo de sol enterrado,
En el sonido de una risa en un ataúd,
Un hombre que despierta sentado,
Sumergido en su infinita quietud.
Arranca el polvo a los años,
Acaricia al pasado que afecta su salud,
Mira el reloj y cuenta los pedazos,
Del niño que perdió su juventud.
Se acerca a lo lejos vientos huracanados,
Sigue tieso y se aferra a su dark side of the moon,
Su hermano se prende fuego,
Junto al papel del poema escrito con rouge.
Los puntos y acentos se escriben con sangre,
Se borra con el codo, la mano y la saliva,
El hambre de una boca atada con alambre,
De diferentes tipos de restos, escatofagia y comida.

Vi de todas maneras salir al sol, A calentar el firmamento. / Umiel - Junio 2013



Es como tener un remolino pequeño,
Danzando en la punta del dedo,
Y al interior de su garganta,
En una avatar de palabras,
En su movimiento se enreda,
Se atraganta,
Sin atisbar a dejar de pronunciar,
Sigue entre vómitos,
Desangrándose en verborragia.

Se sienta sobre el marco de un cuadro,
Lo desbalancea,
Lo confunde
Los relojes ya no se derriten,
Los relojes solo quieren arder.

Un hombre que se empaña,
Entre lo que desea,
Y lo que realmente es.
El humo de lo posible,
Lo que aparece,
Cuando se escapa del dolor,
Y empieza a correr.

Vi tipos destruyéndose ante una mujer,
La indiferencia cruel de mirar a los lados,
Mientras buscaba un gesto tierno,
Los intentos tan siniestros,
De transformar algo que no quiere ser.

Vi gente acostada en la calle,
Abrazada y riendo,
Vi tipos en Alfa Romeo,
Odiar al mundo en su desenvolvimiento,
Vi luchar a una flor,
Contra la fuerza irrespetuosa del viento.
Vi palabras teñir de desprecio,
Al remolino cuando muestra su aliento.
Vi a un marciano encontrar el amor,
Una mañana, mar a dentro.
Vi de todas maneras salir al sol,
A calentar el firmamento.

Un réquiem por mí,
Por mis oídos,
Y por mis sentimientos.
Una copa más por favor,
Y otra para el lamento.

domingo, 23 de junio de 2013

Valentía miserable, Ética cobarde. / Umiel - Junio 2013

Imagen 1


Tinta china de tortura para uno,
Tintero para otro,
Secretos públicos,
Mal gusto, muy mal gusto.

Se derrite por imitaciones,
Que vagan por el mundo.
Cosa de locos para dos,
Puñalada para uno.
Valentía miserable,
Ética cobarde.

Sus intereses degradantes,
Entre ellos mi arte.
Mi corazón y mis manos,
Su basura desbordó por todos lados.

Un santo sin fe,
Un izquierdista comprando un auto,
De alta gama,
No usado.

Juana de Arco corrupta,
Monjas putas,
Prostitutas frígidas,
Dibujos animados racistas.
Un maldito olor a café rancio,
Un maldito olor a café.
A café colombiano.

Imitaciones baratas desnudan su falta de gracia,
Derramando su cinismo en la boca de mujeres desgraciadas.
Luego me pregunto de donde vino el miedo,
De perfume sofocante,
De fantasías sin deseo.

La predicción de una catástrofe,
Debería poner balas al revolver,
Para defenderme o sacrificarme.

Un plato con menos comida que cianuro,
La escatología de las miserias pintando las paredes,
Y ese maldito olor a café rancio,
Ese maldito olor a café,
A café colombiano.
La puta ética cobarde,
La mentira se te asoma por todas partes.

Un vaso de alcohol, un cigarro y un engaño,
Un caracol deslizándose en la hoja de un cuchillo,
La baba seca de su camino,
Mis vómitos a su lado.

Violaste y golpeaste hasta la muerte mis sentimientos,
Y los dejaste sin vida en las vías,
De un tren abandonado.
Tu cinismo, egoísmo, locura,
Y estupidez están implicados,
Tu mediocridad les conseguirá un abogado.

Recuerdo haber cantado,
Dios le da pan a quién tiene anorexia,
Y sin traspié ni dislexia,
Se asoma el hecho putrefacto.
El eco de una ideología rebotando,
En una mente sin gobierno ni estado.

Se duerme en aquel banco ese niño viejo,
Al lado del cuerpo suicida de un tipo enamorado.
Sangre y miseria,
Vampiros y abejas,
Flores blancas venenosas,
Y perfume exquisito de flores negras.
Al lado del recuerdo el despropósito,
Su corazón repleto de parásitos.

Un vaso alcohólico y un cigarro armado,
Su mediocridad conseguirá un abogado,
Imitaciones baratas y enfermas,
Las miserias con mal gusto,
Beben el hedor de ese café de mierda.
Los besos con poca alma,
Y mucha lengua.

El semblante de los cuerpos y las vías,
Mis vómitos y su hipocresía.
No compartiré la mesa contigo Alicia,
Ni con ninguno de tus invitados.

Tinta china de tortura para uno,
Tintero para otro,
Olvido y asco para todos.
Un vaso, un cigarro y un engaño.

Imagen 2

martes, 18 de junio de 2013

Delirar, solo eso quiero. / Umiel - Junio 2013

Imagen 1.

Me veo envuelto en un huracán...
Un huracán que se haya en mi cuarto... 
Ese aire que mueves con cada contoneo de tus caderas...
Haciéndome rebotar contra las paredes
Haciéndome morir en la arena...
Suyo me ve
Desvanecerme
Entre tus piernas...
Derretirme en tu tacto,
Fundiéndome con el sueño
En un solo acto...
En un acto torbellino del huracán de sus encantos...

El reloj se detuvo,
El viento también,
La locura asomo escondiendo el rostro,
Con una guadaña en la mano,
Y una boca llena de sed.
Ella se rindió a sus manos,
Mientras la muerte se desparrama por doquier,
Inundando nuestra casa,
Nuestros cuerpos,
Los hijos por tener…

Aún hoy entre los restos,
Te recuerdo,
Y me dejo ser en eso,
Vuelvo a desearte,
Vuelvo a necesitarte,
Como si hoy se pareciera en algo al ayer…

Por eso…
Porque podría,
Porque lo siento,
Porque no puedo evitarlo…

Quiero besarte,
Quiero besarte y tocarte de una forma,
Absolutamente irracional.
Quiero escuchar el gemido de tu aliento,
Quiero acariciarte hasta sumergirte en espasmos,
Esos bellos contoneos excitados,
Olfatear centímetro a centímetro tu piel,
Para encontrar en el camino el aroma del placer.
Quiero tomarte del pelo y masturbarte,
Hasta que me inundes de sed,
Quiero hacerte el amor en todo el cuerpo,
Hasta morir en el sudor desfallecidos de deseo.
Simplemente en este delirio,
Simplemente eso quiero…


Imagen 2.

De apoco, las luces se apagan. / Umiel - Junio 2013

Imagen 1.


Ya no te persigo divina,
En mi sueños.
La voracidad ya no es,
Sinónimo de fiesta.
Ya no importa si voy,
O si viene,
Ya no importa si sonríe,
Siempre llega incompleta.
El cazador se retira,
No está de huelga.
¿Para qué hablar en mentiras?
¿Para qué dar impresiones imperfectas?

El camino no empieza de vuelta,
Habrá que volver caminando,
Habrá que volver agarrándose la cabeza,
Habrá que aprender a medir los sentimientos,
Habrá que dejar de lado los impulsos,
Habrá que quitarlo de esta cuenta,
Ya no suma, y no puedo afrontar la resta.
"Lo que pudo haber sido",
Pesa demasiado para estas delgadas piernas.

Esta circulación débil de fumador empedernido,
La anestesia del humo con fragancia,
El letargo de una pupila dilatada,
Para borrar el desgano,
De un ojo que se pone rojo,
Para no llorar.
¿Para qué mentirles?
Pero tampoco tengo la fuerza para desnudarme,
Ante todos tan frágil y sensible,
Porque está abierta la temporada de caza,
Y vivo encerrado solo en un cuarto de mi casa.

Ya no te persigo divina,
En mi sueños.
La voracidad ya no es,
Sinónimo de fiesta.
Ya no importa si voy,
O si viene,
Ya no importa si sonríe,
Siempre llega incompleta.
El cazador se retira,
No está de huelga.
¿Para qué hablar en mentiras?
¿Para qué dar impresiones imperfectas?

Me siento en la silla recitando una poesía,
Quizás alguien tome algo de esta utopía,
Antes que empiece la descarga.
El humo sale de mi cuerpo
Y de a poco las luces se apagan...

Imagen 2.

domingo, 16 de junio de 2013

El péndulo ya no baila. / Umiel - Junio 2013

Imagen 1.
Dime hasta cuando el péndulo bailará,
Cuento las vueltas de las estrellas alrededor de tu cabeza,
Patino en el vaivén de la arena humedecida del mar,
La playa confundida en tu confusión,
La autoridad de las inseguridades,
Y la falta de bondad de tu convicción.

Caminando entre las hormigas,
De las cuales no me puedo distinguir,
Como mantequilla arrojada bajo el sol,
Beso tus labios y tus pies,
Me duermo en tu vientre sin fe.
Sobre la vía en un andén,
Bailando en patines ella se echa a llover,
Decidió hablar sin parar,
Decidió llenar el espacio con ruidos,
Para no mirar más el espacio vacío,
Que deja el silencio de esta verdad.
Que en el esfuerzo de encerrarlo en el corazón,
Pronuncia su denuncia en cada latido,
Y se escucha su crítica,
Si apoyas tu oído en mi pecho,
Se oye su lamento cuando vibra,
En las venas de mi pene erecto,
Penetrando el aire con polvo,
Que dejó la huida del deseo.
Toca mis mejillas humedecidas,
Y úntale a tu sonrisa una compasión de mermelada,
Dame un poco de lo que comes,
Así voy a morderlo a tus pies,
Me entretengo en la voracidad,
Mientras armas las valijas que debiste armar ayer.

Al amor desvelado sin motivo. / Umiel - Junio 2013

Imagen 1.

Me vi llorando de una forma tan tierna,
Que me hizo creer que estoy relleno de algodón,
Porque una caricia de viento mal intencionado,
Podría astillar el cristal color beige – marrón.
Y entre los golpes de la mente y el corazón,
Se me salen los guantes,
Caen junto a mi rostro,
Y no logro levantarme.
De fondo recita la cuenta regresiva,
Y tu conciencia se echa a correr.
Y aunque la tortuga sea emprendedora,
La liebre ya no se equivoca,
Ya no dormirá jamás…


En los huecos de mi cuarto,
Rechinan los besos y abrazos,
Como oxido en las bisagras.
De color cobre, agudo y seco.
En la parte más alta de este puente,
Dejaré mi suerte al viento invernal.
Cavaré tumbas en mi pecho,
Pondré coronas de espinas a mi placer,
Hay una nostalgia,
Que sugiere a los ojos no ver.
La figura de la belleza a veces es el camino,
Al amor desvelado sin motivo.

Retrato de un puzzle de recuerdos... / Umiel - Junio 2013



El orgullo de smoking negro, camisa blanca y moño rojo, se quita el sombrero y nos alerta para estar atentos ante una de sus sorpresas. El acto falló y en vez de conejo encontramos una momia de ocio. La soberbia casi sin mostrar un gesto de confusión tomo la sierra y abrió la caja por uno de sus vértices, continuó sonriente por toda la caja hasta que la parte de arriba de la asistente se tumbó sobre sus pies.
Reaccioné y le comenté a un espectador que estaba junto a mí, que algo estaba pasando, y sí - me dijo, nadie esperaba que cayera su cabeza sobre sus pies. Si hubiera sobrevivido, moriría de nuevo.
Capte que estaba pasando algo y no sabía que.

El amanecer nos dejó una rosa con espinas,
La lengua recuerda un café endulzado con sal,
Se arruga la piel de los dedos,
Empapada de olvido y abstinencia.
Envejece al volver la mirada hacía atrás,
Solo hay un espejo optimista,
Que se ríe ante el actual.
Este lo toma como burla,
Y el tiroteo acaba mal,
La mariposa no murió de fiebre,
Y con los ojos abiertos reposa al marchitar.
Ya rompí uno de un golpe y la sangre se secó,
Las moscas me acosan en una orgía de sanguijuelas,
Una bolsa de carroña para estos cuervos,
Que picaron las costillas hasta verme claudicar.
Y que ahora se entretienen al verme secar.
Deshidratado, famélico y puritano,
Sobre el colchón amarillo de arena del Sahara.
Un camino que nació oculto en la arena,
Una nube en las profundidades del mar,
Una sirena succiona el pene de un pirata y de un ángel,
Y se dice así misma que nunca podrá elegir,
La tentación se sirve negra y blanca,
Y las vampiras cuando salen se quieren divertir.
El esperma no llegó a tocar la bruma del mar,
Y pinocho se masturba al verla gargarear y tragar.

Retrato de un puzzle de recuerdos...
Asombro  en un collage de fatalidades,
Mi realidad, mis dificultades;

La falta de optimismo,
Y la reina de mis debilidades.